A pesar del parón de dos semanas, nunca perdieron la concentración y gestionaron su ventaja con carácter, por lo que tiene un poco más cerca la permanencia en Plata
Foto del digital Zamora 24H
ZAMORA RUTAS DEL VINO 29 (17): Lautaro, Aravena, Fer, Sánchez, Cubillas (1), Dela, Jortos (7), Pérez (1), Magariño, Maide (2), Guille (4), Horcajada (3), González (5), Guarido, Sarasola (3) y Samudio (3).
SD TEUCRO 25 (11): Werbmter, Manojlovic, Dzokic, Sanchez, Sierra (2), Remeseiro (1), Pereiro (1), Alejandro (3), Herrera (4), Rey (5), Sio (2), Martinez (2), Gomez, Antón (2) y Deco (3).
Parciales: 1-0, 5-3, 8-4, 9-6, 12-9, 17-11 (descanso)19-14, 23-16, 27-19, 27-21, 28-24 y 29-25.
Árbitros: Millán Cazorla e Izquierdo Molina
Teucro Pontevedra llegaba al pabellón municipal Ángel Nieto marcando la frontera del descenso para medirse a un invicto en la segunda fase Balonmano Zamora Rutas del Vino. Un tropiezo del equipo pontevedrés podría situarlo en los puestos de descenso, aunque la multitud de partidos aplazados desdibujan la posición real de los equipos en la tabla. Unos aplazamientos que también ha sufrido en primera persona el BM Zamora Rutas del Vino, que no había podido disputar sus dos últimos encuentros ante Bordils y Sant Martí Adrianenc.
Casi tuvieron que pasar cinco minutos para que se estrenara el marcador. Fue Guille para el Balonmano Zamora Rutas del Vino el que consiguió abrir la contienda con una diana rompiendo la cerrada defensa de Teucro. Poco después, Irene Vilaboa perdía a uno de sus principales baluartes, Dzokic, que sufría un fuerte golpe en la cabeza y no volvía a aparecer en el resto del encuentro al chocar con un compañero en una acción defensiva.
El ataque del BM Zamora Rutas del Vino demostró ser más fluido durante los primeros minutos, más versátil, alternando el juego por los extremos, con las fintas por el carril central y con el lanzamiento exterior. Vilaboa no estaba satisfecha con la defensa de su equipo, que era incapaz de frenar a la ofensiva local. Además, la escuadra de Ricardo Margareto aprovechaba el juego romo en ataque de Teucro, con lentitud en la circulación y fallos en los pases, para generar primeras oleadas imparables. Únicamente la inspiración de Wermbter en portería permitía que el choque no se rompiera a favor del Rutas del Vino.
No obstante, las ventajas se mantenían y en el ecuador del primer acto Irene Vilaboa se vio obligada a parar el duelo con 8-4 con el primer tiempo muerto. Ese parón serenó a su equipo, aunque el BM Zamora siguió dando la sensación de que en cualquier momento podía romper el choque. Y así fue, con Jortos haciendo de principal estilete. Un 4-1 de parcial en los últimos tres minutos antes del descanso con un Teucro desquiciado, permitió a los de Margareto marcharse al descanso con la máxima ventaja 17-11.
Se iniciaba la segunda parte con Teucro en inferioridad, por exclusión de Wermbter. Para entonces el arbitraje ya estaba generando airadas protestas en ambos bandos. Ninguno estaba conforme con la actuación de los colegiados.
La remontada era una quimera pero Vilaboa intentó que los suyos no se desconectaran del duelo para tratar de suturar la hemorragia. Los minutos pasaban y el BM Zamora Rutas del Vino mantenía distancias de seis goles. Es cierto que Teucro mejoró la defensa, endureciendo los contactos y sobre todo cortando el torrente de contragolpes que había permitido en la primera mitad. Pero los zamoranos mantuvieron su firmeza atrás, apoyándose en Lautaro en portería, para no sufrir en ningún momento. Teucro logró acercarse a cinco goles (20-15, min.36) pero el intercambio de golpes favorecía al BM Zamora.
Los minutos pasaban y pese a la superioridad local, la escuadra pontevedresa tuvo arrestos y fortaleza mental para no marcharse del encuentro. Fue así como Teucro entraba con 28-24 a falta de cinco minutos para el final. Era la renta más baja para el BM Zamora desde el primer tiempo y obligaba a Ricardo Margareto a parar el choque con un tiempo muerto. Ese parón para ‘resetear’ sentó mejor al Rutas del Vino, que supo jugar con el tiempo para terminar ganando sin sufrir por 29-25.
Crónica de Ángel García en el digital Zamora 24H
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