EL RUTAS DEL VINO RECUPERA SENSACIONES

Los "Guerreros de Viriato" superaron a Palma del Río en un encuentro que pareció sentenciado al descanso.

ARS Club Palma del Río 27 (10) - BM Zamora Rutas del Vino 33 (21)

ARS Club Palma del Río: Martin (p), Ruiz, Adrian (1), Reyes (1), Portero (2), Morales (8), Plaza (5), Antunez, Torres (p), Villegas (1), Peinado, Povedano (2), Sanchez (2), Sainz y Morgado (5).

BM Zamora Rutas del Vino: Barrientos (p), Fernando, Cubillas (2), Jortos (1), Ignasi (p), Raul (5), Iñaki (1), Guille (2), Ramiro (7), Mouriño (4), Luis (1), Jaime Gonzalez (5), Dalmau (5) y Jaime Gallego.

Árbitros: Juan Maria Sanmartin y Alvaro Garcia.

Parciales cada cinco minutos:

3-3, 5-5, 5-9, 9-12, 9-17 y 10-21.

13-22, 17-24, 20-26, 21-28, 24-29 y 27-33

El BM Zamora Rutas del Vino consiguió ayer un importante triunfo que pone fin a su mala racha de dos derrotas consecutivas y le ayuda, además, a coger aire respecto a la zona baja de la tabla clasificatoria. Los de Leo Álvarez mostraron ayer la paciencia suficiente para superar unos primeros minutos complicados y a partir del minuto 10 empezaron a abrir brecha en el marcador para no abandonarla mas. Al descanso, los zamoranos ganaban de 11 goles y aunque en la segunda mitad el ARS Palma Del Río apretó mucho en defensa y consiguió recortar diferencias, Zamora supo administrar su ventaja para llevarse el triunfo.

Los dos equipos se jugaban mucho en El Pandero. El equipo pistacho sabía que perder ante el colista del grupo supondría, además de complicarse mucho la vida en la clasificación, un duro golpe para la oral del equipo, ya de por si tocado tras las dos últimas derrotas.

Mientras, los locales necesitaban ganar en su feudo y saltaron a la cancha como una exhalación. Locales y visitantes protagonizaron un inicio de partido trepidante, en el que los ataques se impusieron a las defensas y así, en apenas tres minutos de juego el marcador reflejaba ya un empate a tres goles.

El Rutas del Vino empezaba a darse cuenta de que ese ritmo no le beneficiaba y que debía encontrar la manera de frenar el ataque de su rival, y ´Leo Álvarez empezó a mover fichas. Tardó un poco en encontrar la tecla el técnico local, que de entrada consiguió frenar el ritmo de partido y poner en práctica un balonmano de mas control que hizo que los goles empezasen a llegar con cuanta gotas (5-5, minuto 10). Al final lo consiguió el entrenadorr de los zamoranos, que tras frenar a su rival encontraron el camino hasta la puerta contraria moviendo bien el balón e intentando no precipitarse en ataque. Y así, el BM Zamora Rutas del Vino conseguía firmar, en poco mas de cinco minutos, un parcial de 0-5 que dejaba el marcador en 5-10 cuando se cumplía el minuto 16 de partido. El equipo se encontraba bien y eso se notaba en un juego fresco sobre la cancha.

Metió una marcha mas ARS Palma del Río en busca de la remontada y gracias a los goles de Raúl Morales, máximo goleador del partido, y Álex Plaza consiguieron los locales disminuir la diferencia en el marcador (9-11, minuto 19). Y cuando peor lo estaba pasando Zamora llegaba, además, la exclusión de Ramiro Martínez. Pero lejos de verse perjudicado por ello, el Rutas del Vino sacó fuerzas de flaqueza, reagrupó a sus hombres y fue precisamente jugando en inferioridad numérica cuando consiguió frenar a su rival e incluso anotar dos goles que le devolvían un colchón cómodo con el que trabajar (9-13, minuto 21).

A partir de ahí los Guerreros de Viriato volvieron a imponer su ley. Con una férrea defensa y un contragolpe letal los zamoranos aniquilaron a su rival, que cada vez se ponía mas nervioso en busca del gol y perdía numerosos balones ante la presión visitante. Y así los goles zamoranos fueron cayendo uno tras otro hasta alcanzar los 10 de ventaja a falta de 2´16 para el descanso (9-19).

Alejandro Plaza anotaba por fin para los locales, pero Zamora replicaba y se iba al final de la primera mitad con 11 goles de renta (10-21). Los locales debían intentar remontar en la segunda mitad y lo hicieron.

ARS Palma del Río cambió su dinámica de juego, apretó los dientes y buscó la manera de rehacerse, pero Zamora, con un colchón cómodo, supo defenderse a la perfección para no dar opciones a su rival. Y eso que el empuje de los cordobeses les llevó a acercarse a tan solo 4 goles cuando aún faltaban 6 minutos para el final del encuentro (24-28). Los de Leo Álvarez se habían relajado quizás demasiado, pero cuando le vieron las orejas al lobo volvieron a ponerse el mono de faena y con dos goles de Ramiro Martínez en apenas un minuto recuperaban el control (24-30, minuto 56).

Quedaban cuatro minutos para la conclusión del encuentro y el técnico local pedía tiempo muerto para intentar marcar el camino, pero lo cierto es que Zamora ya no dio opciones a su rival. Al final una importante victoria que supone una inyección de moral para el equipo que ya piensa en su próximo partido.

Crónica de Area 11 en La Opinión El Correo de Zamora