No hay partido fácil.
Foto cedida por zamora24horas.com
MMT Seguros BM Zamora 27 (11) - BM Torrelavega 26 (11).
MMT Seguros BM Zamora: Leo Maciel (p) (1), Ceballos, Abalos (1), Fernando, Iriarte, Peli (3), Octavio (10), Jortos (4), Posado (p), Iñaki, Guille (3), Carlos, Mouriño (1), Cangiani (3) y Adrian (1).
BM Torrelavega: De Vega (p), Benito (4), Cancio (3), Crespo (1), Dorado (3), Fernandez (4), Gonzalez, Hernandez (5), Merino, Oliver (1), Perez Silos (3), Sergio, San Emeterio, Colunga (1) y Setien (1).
Árbitros: ROdriguez Estevez y Rosendo Lopez.
Parciales cada cinco minutos:
2-1, 3-3, 4-4, 7-5, 9-8, 11-11.
13-12, 17-15, 20-18, 22-22, 23-23 y 27-26.
Acudir cada sábado al Pabellón Municipal Ángel Nieto para ver los encuentros del MMT Seguros supone perder años de vida por la tensión e intensidad que se respiran en cada lance. Pero también es disfrutar con un equipo que, dejando a un lado su mejor o peor juego, confía hasta el último segundo en sus posibilidades. Esas características que habitualmente tienen los encuentros que disputa el Balonmano Zamora se juntaron este sábado en el duelo ante el BM Torrelavega.
Rachas de buen juego alternadas con fases de espesura a la hora de crear en la ofensiva. Ventajas mínimas y desventajas exiguas. Defensas duras. Arbitraje controvertido. Y final de infarto. Es el día a día de los pupilos de García Valiente y de una fiel hinchada que este sábado volvía a responder. Y no solo eso. Volvía a marcharse a casa eufórica después de un encuentro trepidante e igualado que se decidió a falta de tres segundos y de penalti.
Jortos ejerció de capitán y con empate a 26 dianas tomaba la responsabilidad de lanzar el siete metros. No le tembló el pulso, anotó el tanto, se lo dedicó a su padre recién jubilado y la locura estalló en los graderíos. Había sido un encuentro con vaivenes, entre dos equipos muy trabajados y que nunca le perdieron la cara al partido. Las ventajas máximas para uno y otro equipo no superaron nunca los dos goles, lo que es sinónimo de permanente tensión en la pista y también de continuos nervios en las butacas de la hinchada. Al MMT le costó durante muchos minutos percutir en la trabajada defensa 5-1 de Torrelavega, pero cuando el partido se indigesta, siempre aparece Octavio para encauzarlo. Ante los cántabros, el leonés sumó diez dianas más a su cuenta particular.
El 11-11 al descanso dejaba clara esa igualdad. Una equidad que se hubiera mantenido hasta el pitido final si Jortos ni hubiera ejercido de líder para asumir la responsabilidad y romper el empate a 26 que permitía a los zamoranos sumar dos puntos de oro que le colocan segundo en la tabla, tras la derrota del Barcelona B (próximo rival). Los pistacho siguen la estela de Palma del Río, que cuenta por victorias sus encuentros y dentro de tres semanas se verán las caras en tierras andaluzas.
Pese a que el triunfo del Balonmano Zamora MMT Seguros se cimentó, como siempre, en el trabajo de equipo, los aficionados se fueron del pabellón con tres nombres propios en la cabeza. Octavio, con diez dianas, volvió a ser el líder del equipo; Jortos, con el tanto en el último suspiro, tomó la responsabilidad ejerciendo de capitán; y ‘Fafa’ debutaba de manera prometedora, con tres dianas y una rapidez endiablada en el extremo.
Al final del encuentro, los jugadores se abrazaban en el centro de la pista celebrando una victoria capital en el reinicio de la competición. Octavio, el jugador más desequilibrante del duelo, sigue festejando cada triunfo del equipo y cada gesta personal con una naturalidad pasmosa. Esta vez anotó diez de las veintisiete dianas que tuvo su equipo. Eso sí, no metió la decisiva porque no estaba escrito.
Cuando el colegiado señalaba el siete metros a falta de tres segundos para el final, una simple mirada entre Jortos y Octavio ya tenía un significado. Jortos lanzó y anotó sin dudar: “Estaba tranquilo. Miré a Octavio y le agradezco que me dejase tirar el penalti decisivo. Últimamente estoy teniendo fortuna en los lanzamientos decisivos y esta vez volvió a aparecer. Estaba tranquilo, sabía que tenía que entrar y gracias a Dios marqué”, explicaba, a la vez que le dedicaba el tanto a su padre: “Justo este sábado se jubilaba y ha tenido la cena de despedida”, sonreía orgulloso Jortos.
Todo en un partido muy duro, tal y como confesaba el capitán pistacho: “Este tipo de encuentros no nos gustan a los jugadores porque estás hasta el último instante tenso; pero entendemos que a la afición les encantan y nos alegramos de que hayan disfrutado. Sabíamos que iba a ser un partido complicado ante un rival muy duro y es una victoria muy importante”, finalizaba.
El tercer nombre propio era el del argentino ‘Fafa’. El extremo debutaba con el equipo pistacho y los hacía con una actuación prometedora. Con apenas cuatro entrenamientos en las piernas, el bonaerense sumó una importante cantidad de minutos e hizo tres dianas: “Ha sido un debut inmejorable. Desde el momento de la presentación cuando la gente ovacionó mi nombre, hasta el partido tan intenso, pasando por el ánimo del público al final y con el triunfo sobre la bocina”, recordaba Facundo.
Por último, ‘Fafa’ reconocía que fue un duelo de vaivenes: “Hemos jugado a rachas. Hubo ratos en los que nos costaba mucho abrir su buena defensa y la pena es que no fuimos capaces en ninguna ocasión de haber roto el marcador. Llegamos a ir dos goles arriba, pero algunos errores puntuales en situaciones relativamente fáciles nos obligaron a tener que pelear hasta el final”, zanjaba.
Crónicas de Ángel García en zamora24horas.com.
No hay comentarios:
Publicar un comentario