El equipo sigue acusando la falta de rodaje y las lesiones
Primeros de septiembre y, como es normal en pretemporada, no se puede ver la mejor versión de los distintos equipos. Ese fue el caso este sábado del Balonmano Zamora, quien recibía en el Ángel Nieto a un Balonmano Soria de Primera Nacional ante su público.
El pabellón zamorano, con un número reducido de espectadores para seguir las normas frente al Covid-19, rindió homenaje antes de nada a Manuel Camba. Momentos de recuerdo a una persona muy ligada con el deporte de la ciudad que dejaron paso al encuentro.
El Balonmano Soria se plantó muy serio, dejando poco espacios en defensa y encontrando en su portero al mejor aliado posible. Teijón, aprovechando su envergadura, fue un muro en varias ocasiones para los pistacho, quienes en la otra parte del campo dejaron varias facilidades al rival, que abría el marcador con un gol entrando por la parte central.
Margareto, muy activo en banda, siguió probando ajustes, tratando de probar sistemas, rotaciones y jugadas en estas primeras tomas de contacto. Sin embargo, los sorianos no dejaron que el Balonmano Zamora estuviera cómodo, manteniendo la igualdad hasta el descanso, cuando en el último suspiro los locales marcaron el 15-14 desde los siete metros.
Tras el descanso la tónica se mantuvo. Guarido y Posada mostraron seguridad en la portería, tratando de mostrar que pueden pelear en División de Honor Plata. Por su parte, Cubillas fue el mayor incordio para el bando contrario, aprovechando su velocidad y entrada a portería. Pese a todo, los de Margareto no terminaron de coger velocidad para cabreo de su técnico, quien recriminaba las acciones que no le gustaban desde la banda y trataba de cambiar la imagen sobre el parqué.
Cambio de rumbo que no llegó, pues pasado el minuto 20 de la segunda mitad el marcador reflejaba un apretado 24-24 y un Rutas del Vino con dificultad para doblegar a un rival que, pese a tener en mente el objetivo de ascender, cuenta con una categoría menos.
Y es que, a falta de minuto y medio, los de Soria se colocaron por delante con un 25-26 que Margareto utilizó para ejercer su derecho a tiempo muerto y modificar cosas en sus jugadores. Modificaciones que no sirvieron de mucho pues, la jugada posterior no terminó con disparo y los visitantes pudieron tener la posesión para poner nervioso al Balonmano Zamora, que aguantó el tipo con una magistral parada de Guarido yendo al suelo, aunque no consiguió mover el resultado final.
Falta de carburación y rodaje para un equipo que cuenta con un primer entrenador y varias piezas nuevas respecto a hace unos meses. No obstante, la afición, pese a no poder estar de la manera habitual, no dejó de arropar a los suyos, mostrando que son uno de los puntos fuertes de un equipo que ya mira al comienzo de la División de Honor Plata.
Crónica del Digital Zamora 24HORAS
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